¿Qué hace su hijo?

No reacciona cuando pasa de la sombra a la luz

Dessin illustrant un enfant qui ne réagit pas en passant de l'ombre à la lumière

No reacciona cuando pasa de la sombra a la luz

¿Has notado que tu hijo no reacciona cuando pasas de un entorno oscuro a uno con más luz? No entrecierra los ojos ni parpadea. 

El hecho de que un niño no reaccione cuando pasa de la sombra a la luz no significa necesariamente un problema visual. Sin embargo, es importante comprobar si presenta otros síntomas, que podrían ser signo de un problema de visión.

El papel de la pupila en la adaptación a los cambios de luz

La pupila es la parte negra del ojo que se encuentra en el centro del iris. Desempeña un papel crucial en la visión, ya que regula la cantidad de luz que entra en el ojo. La pupila es como un diafragma que se abre o se cierra para dejar entrar más o menos luz.

¿Cómo reacciona el ojo cuando se encuentra en un espacio en penumbra?

Cuando el ojo está expuesto a la sombra, las pupilas se dilatan para dejar entrar más luz, lo que permite ver mejor en condiciones de poca luz. 

Esta reacción se conoce como reflejo pupilar de acomodación a la oscuridad.

¿Cómo reacciona el ojo cuando se expone a la luz?

Cuando el ojo se expone a una luminosidad intensa, las pupilas se contraen para limitar la cantidad de luz que entra en el ojo. 

Esta reacción se conoce como reflejo pupilar de miosis o reflejo pupilar de luminosidad. Esto protege el ojo de posibles daños ocasionados por la exposición excesiva a la luz y también ayuda a mantener una buena agudeza visual.

El papel de la retina en la adaptación de los ojos a la luz

La retina es la parte del ojo que convierte la luz en impulsos eléctricos. Esos impulsos se transmiten al cerebro para ser interpretadas como una imagen. La retina se adapta a los cambios de luz gracias a la presencia de dos tipos de células sensibles a la luz, los conos y los bastones. Los conos son sensibles a la luz brillante y nos permiten ver detalles y colores, mientras que los bastones son sensibles a la luz tenue y nos permiten ver de noche.

Cuando se pasa de la oscuridad a la luz, y viceversa, los bastones se desconectan temporalmente para evitar la sobreestimulación y permitir que los conos tomen el relevo. 

Esta adaptación a diferentes niveles de luminosidad se conoce como «adaptación retiniana».

Es importante tener en cuenta que puede tardar varios minutos en completarse.

El papel del iris para regular la cantidad de luz que entra en el ojo

El iris es la parte coloreada del ojo que vemos alrededor de la pupila. Desempeña un papel clave en la adaptación a los cambios de luz, ya que regula la cantidad de luz que entra en el ojo. 

Cuando el entorno es muy luminoso, el músculo esfínter del iris se contrae. Esto hace que la pupila se contraiga y limita la cantidad de luz que entra en el ojo.

Cuando el ambiente es oscuro, el músculo dilatador del iris permite que la pupila se dilate y deje entrar más luz.

¿Cuándo debes preocuparte si tu hijo no reacciona a los cambios de luz?

Los niños reaccionan de manera diferente a los cambios de luminosidad. Esto no significa necesariamente que tengan un trastorno de la vista.

Sin embargo, este tipo de indicios pueden asociarse con otros signos que sugieren una mala visión, como: 

  • que el niño se acerque excesivamente a los objetos, 
  • la ausencia de fijación o de seguimiento ocular, 
  • movimientos espontáneos anormales de los ojos, 
  • la ausencia de parpadeo en caso de amenaza, 
  • que el niño se frote los ojos de manera inadecuada, 
  • movimientos estereotipados.

Este conjunto de signos puede hacernos pensar en una deficiencia visual en los niños y requiere un estudio oftalmológico

Algunas afecciones médicas, como los trastornos de la visión, pueden no causar síntomas evidentes en los niños. Por lo tanto, es importante hacer un seguimiento regular. Si tienes dudas, coméntalo con tu pediatra, quien puede derivarte a un oftalmólogo si es necesario.

Más información sobre los trastornos visuales en niños

Ahora sabes cuándo es necesario realizar un examen de la vista si tu hijo no reacciona al pasar de la sombra a la luz. 

¿Quieres saber más sobre los defectos visuales del niño? Nuestros oftalmólogos te explicarán diferentes patologías como el estrabismo, la miopía, el glaucoma congénito, la hipermetropía, el astigmatismo o la ambliopía.