En una foto, mi hijo tiene un reflejo rojo en un ojo y el otro blanco, ¿qué puede ser?
Al mirar la última foto que le sacaron a tu hijo, observas un reflejo diferente en los dos ojos: uno es rojo y el otro blanco.
El profesor Francis Munier, jefe antiguo de la unidad de oncología ocular pediátrica y de la unidad de oculogenética del Hospital oftalmológico Jules-Gonin, te explica por qué es importante controlar la salud visual de tu hijo cuando percibes este síntoma.
¿Por qué un reflejo blanco en el ojo de mi hijo merece una cita con un oftalmólogo?
Detectar una pupila blanca nunca debe pasarse por alto. Su origen puede ser malformativo, infeccioso o accidental. También puede tener un origen canceroso.
El retinoblastoma, un cáncer intraocular raro
El retinoblastoma es un tumor canceroso que se aloja en el globo ocular, más concretamente en la retina. Es el único cáncer de un niño que es reconocible estéticamente debido al aspecto blanco de la pupila. Debes pedir una consulta sin demora con el especialista.
El retinoblastoma tiene muy buenas posibilidades de curarse si se detecta precozmente. Por lo general, se manifiesta antes de los 5 años. Por eso es importante que los padres examinen los ojos de sus hijos.
Si quieres saber más sobre el retinoblastoma, te invitamos a leer la página dedicada a esta enfermedad retiniana.
¿Qué ocurre si detecto un reflejo blanco en el ojo de mi hijo?
Te aconsejamos que lo comentes de inmediato con tu pediatra u oftalmólogo, que podrá realizar un examen del fondo del ojo y hacer un diagnóstico preciso.
Todas las enfermedades oculares, incluido el retinoblastoma, se tratan más fácilmente si se descubren rápidamente. Por lo tanto, no pases por alto ningún síntoma: fatiga visual, molestias, visión borrosa, reacciones inflamatorias, dolores de cabeza o mala agudeza visual. Un examen oftalmológico permitirá detectar cualquier trastorno ocular.
Más información sobre las patologías oculares del niño
Ahora ya sabes por qué un reflejo blanco en los ojos debe ser examinado por un oftalmólogo pediátrico.
Y si tienes dudas sobre otros trastornos oculares, te invitamos a visitar nuestras páginas dedicadas a la hipermetropía, la miopía, la diplopía, el estrabismo, la ambliopía, el astigmatismo, el glaucoma congénito o la conjuntivitis.